El programa escrito
Su empleador es responsable de establecer y mantener un programa de protección respiratoria. El programa escrito debe identificar los contaminantes, los respiradores aplicables, la capacitación y todos los documentos asociados.
Selección de respiradores
Antes de usar un respirador, debe conocer los peligros respirables. Revise las hojas de datos de seguridad, los datos de las pruebas de aire y el conocimiento del proceso para determinar los peligros para los empleados. Confíe en los respiradores solo cuando los controles de ingeniería (como la ventilación) no sean adecuados o posibles.
Los respiradores pueden purificar el aire o suministrar aire a la atmósfera. La purificación del aire incluye máscaras contra el polvo, media cara, cara completa y respiradores purificadores de aire con motor. El suministro de atmósfera involucra líneas de aire o tanques de aire comprimido.
Es importante elegir el tipo correcto de filtro purificador de aire; solo filtrará el contaminante para el que está diseñado. El cartucho incorrecto no lo protegerá. Los filtros más comunes incluyen filtros HEPA (para polvo, vapores metálicos), vapor orgánico (para solventes, adhesivos y vapores de pintura) o una combinación de ambos.
Evaluación medica
Los respiradores pueden dificultar la respiración. Para usar un respirador, los empleados deben ser evaluados y aprobados por un médico
Prueba de ajuste
Si los empleados necesitan usar respiradores, deben hacerse una prueba de ajuste para asegurar que el respirador sea del tamaño correcto. Si el respirador no le queda bien, pruebe con otros tamaños o marcas. Realice una prueba de sellado negativo cada vez que se ponga el respirador. Los empleados deben estar bien afeitados durante las pruebas de ajuste y al usar respiradores. Se requieren pruebas de ajuste anualmente.
Inspecciones
Los respiradores deben inspeccionarse antes de cada uso. Inspeccione todas las partes y piezas por defectos, grietas y funcionalidad de válvulas y sellos.
Mantenimiento
Los empleados son responsables de mantener adecuadamente sus respiradores. Almacene en un recipiente limpio y seco protegido del polvo, productos químicos, temperaturas extremas y luz solar. Lave los respiradores con agua y jabón cuando sea necesario. Reemplace los filtros según el horario de cambio de su empresa (para vapores) o cuando la respiración se vuelva difícil (para filtros de polvo). Las máscaras antipolvo deben eliminarse después de su uso.